(Periodista Digital).- El Gobierno de Zapatero estaría estudiando adelantar las elecciones a marzo de 2007. Según información de Enrique de Diego, en la revista Época, el Gobierno querría rentabilizar la euforia social generada por el alto el fuego y, así, descolocar al PP. Se propone esa fecha porque quieren que se produzca "antes de que la ciudadanía empiece a visualizar los duros costes políticos de la negociación de paz".
Después del "alto el fuego" y la mini-reforma ministerial (mini pero de gran calado), el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero se está planteando la posibilidad de adelantar las elecciones generales.
Cinco argumentos pesan en la balanza, según revela la revista Época en el número que salió al kiosko en esta Semana Santa.
1. Clima de euforia.
El primero es aprovechar el clima de euforia social generado por el alto el fuego. Se trata de un activo político de primera magnitud, y aunque es prematuro darlo por definitivo, el ansia de paz de la ciudadanía es tal que percibe esta "tregua permanente" como el principio del fin y también como un éxito histórico de los socialistas.
2. Miedo al precio de la negociación.
Pero tanto como la euforia pesa el miedo... del Gobierno. Este es consciente de que, tarde o temprano, empezar a visualizarse las concesiones políticas, lo que relativizará el tanto a favor del "alto el fuego". Mucho más ahora que Rubalcaba está al frente de Interior con una labor muy concreta.
¿Solución? Adelanto electoral, ahora que hay buen clima y antes de que llegue la factura de la negociación.
3. Forma de plebiscitar el proceso.
El adelanto electoral sería también una petición de respaldo al votante. Según Jaime Mayor Oreja, se pretendería “plebiscitar el proceso, es decir convertir las elecciones en un refrendo a la negociación”. De esa forma, el Ejecutivo de Zapatero se sentiría legitimado y con fuerza para emprender la negociación.
4. Antes del deterioro económico.
Otro factor que baraja Moncloa es el reloj de la prosperidad, cuyas horas se agotan. El circulo virtuoso de la economía puede acabar en 2007, cuando la subida del precio del dinero afecta a las familias endeudadas. El euribor, que puede situarse más allá del 4% en otoño, y una inflación incontrolable pueden pasar factura a las clases medias. Y ya se sabe que el deterioro económico es un argumento electoral de primera magnitud.
5.Hundir en la sima al PP.
Si la oposición ya lo tiene difícil, un anticipo electoral lo descolocaría aún más. El objetivo de Zapatero es cerrarle el paso al PP. Y un adelanto a marzo de 2007, antes de las locales y autonómicas podría sentenciar a Rajoy. Si Zapatero gana los comicios, el PP tendría mucho más difícil ganar el feudo socialista Castilla-La Mancha, por ejemplo.
Además, las propias encuestas internas que manejan el PP no son nada halagueñas: hasta en sus bastiones más emblemáticos tiene problemas.
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